Experiencias:
La Escama del
Dragón II (Viernes día 01 Abril)
Llegaron a la
entrada de la cueva Pesadillita la bárbara dracónida, Raziel el deva clérigo,
Slagathor el Tiflin señor de la guerra, Helenary la humana señora de la Guerra,
Mesius el mago elandrin, Feanaro el Draconido paladín y Tormix el enano
guerrero. Todos entraron dentro y encontraron una bifurcaciones. Raziel
encendió su cetro solar, mientras Helenary encendía la antorcha. Tras seguir
caminando cogieron por el camino de la izquierda y luego por el de la derecha y
Helenary marcó el camino con flechas en el suelo. Mientras Tormix se adelantaba
para ir el primero y de repente ¡Zas!, Activo una trampa y todos cayeron en
ella menos Slagator y Raziel. El interior de la trampa estaba lleno de
cadáveres en descomposición que habían intentado trepar el foso pero no lo
habían conseguido. Slagator lanzó una cuerda, mientras Helenary y Tormix
intentaban apagar un pequeño fuego que había generado al caerse con la antorcha
en uno de los cuerpos. Pesadillota subió por la cuerda, junto con Mesius y
Helenary. Tras muchos intentos subieron todos menos Feanaro y Pesadillita, que
vió más fácil subir por el otro lado. Ya todos arriba tocaba pasar al otro
extremo los demás, por lo que utilizó Helenary su arco con una cuerda para
pasar todos al otro extremo.
Siguieron el
camino hacia el interior de la montaña y Pesadillita se dio cuenta que la cueva
estaba agrietada y aviso a los señores de la guerra. Raziel utilizó su flecha
de luz para lanzarla contra el techo y cayó todo completo sin dañar a ninguno
de los malvados aventureros. Mas adelante y tras varios caminos, encontraron lo
que parecía un brillo dorado que se movía a lo lejos y pareció perderse por el
suelo. Tormix fue a mirar y casi cae a un gran agujero en el suelo. Sacaron a
Tormix de allí y decidieron seguir en busca de un posible camino alternativo. Tras
muchas vueltas y sin ningún camino fijo llegaron a una zona que parecía la
salida, pero en verdad era la misma entrada de la cueva. Tras dar la vuelta
fueron por otro camino llegaron a lo que parecía una zona de un pequeño lago.
Allí fue donde escucharon el rugido del dragón que cada vez se acercaba más
hacia ellos. Seguido de unos temblores de toda la cueva. Tras llegar hasta su
zona Feanaro junto con Raziel tomaron el frente directo hacia donde venía el
dragón. Apareció la gran bestia venerable de platino y les dijo “que hacéis
aquí ladrones” y ellos contestaron, mediante el poder del discurso astral en la
mayoría de las veces, que eran unos aliados del bien, que habían sido malditos
por un poderoso hechizo. El dragón no se lo creyó inicialmente pero al final
accedió de darle una escama de su cuerpo con tal de que no volviera a existir
“El Dragón de las Sombras”.
Salieron todos
de allí pero no fueron capaces de recordar donde estaba El Mago Oscuro.
Estuvieron recabando información entre los pueblos y la ciudad del Espolón del
Aire hasta que dieron donde se ocultaba, en las ruinas de Cimbar. Tras volver
al lugar donde se ocultaba, Slagathor fue capaz de abrir la puerta de entrada y
aparecieron ante el gran Mago Oscuro de Nuevo. Él les dijo “Bien lo habéis conseguido.
Tenemos la máscara del dragón rojo, la escama del dragón plateado y el amuleto
del guerrero que he conseguido yo. Ahora nuestro siguiente paso es....” Fin
La Escama del
Dragón II (Sábado día 02 Abril)
Llegaron a la
entrada de la cueva Grugdur el semiorco matador, Petronila la Shardmind bruja,
Jak el Minotauro el Señor de la Guerra, Drac el bárbaro draconiano, Uliseo un
Clérigo de Ciric que había sido mandado por la gnoma “La Rosa Roja”, Extraño un mago humano y Meg
la tiflin bruja. Todos entraron dentro y encontraron una bifurcaciones. Una voz
parecida a la de Helenary dijo “seguid siempre por los caminos de la
izquierda”. Separémonos dijo Jak con un tono serio. Unos fueron por la derecha
y otros fueron por la izquierda. Tras varias de las bifurcaciones en el
interior de la cueva, uno de los grupos formados por Meg, Extraño y Petronila.
Ellos encontraron como una línea en el suelo que parecía un corte. Tras
examinarla y Meg intentar borrarla siguieron hacia delante y cayeron en una de
las trampas. Era un foso lleno de cadáveres y con un olor de putrefacto. La
única salida fue amontonar algunos de los cadáveres, formando una pila en uno
de los lados. Formaron una pila humana para lanzar a Petronila al aire y que se
teleportara fuera de la trampa. Al conseguirlo pudo tirar una cuerda hacia
abajo que ató a una de las piedras. Mientras el otro de los grupos siguiendo
las indicaciones de Jak y Draconio, pudieron escuchar como tenía problemas los
demás y decidieron ir a ayudar.
Tras salir
todos de aquel foso, siguieron por el camino y encontraron unas flechas
dibujada en el suelo. Meg pudo descubrir que se trataba de Helenary por el tipo
de letra. No tardaron mucho más en volver a dividirse, pero esta vez no fueron
los mágicos en caer en la trampa, sino los fuertes. Ulises como llevaba un
cetro solar en su mano para alumbrar el camino, cayó con el en el foso y se
empezó a prender un pequeño fuego. Tras apagarlo Draconio llegaron los demás
para ayudarlos ahora a la inversa. Siguieron caminando hacia otras de las
bifurcaciones encontrando una zona con agujeros en las paredes en ambos lados.
Grugdur lanzo una de las piedras dándose cuenta que se activaba y empezaban a salir flechas de ambos lados de
la pared. Jak no espero mucho y se lanzó a pasar clavándose una flecha en una
de sus manos y otra en el torso. Tras ver el gran riesgo de pasar así, todos
empezaron a buscar el mecanismo de la trampa hasta que Meg lo vio. Al
comunicarlo a los demás, Petronila lanzo su poder sobre el mecanismo
destruyendo el funcionamiento de la trampa. Tras no encontrar al dragón
decidieron salir por la entrada del principio. Pero en ese momento fue cuando
escucharon el rugido del dragón y sus pasos hasta el exterior.
Apareció la gran
bestia venerable de platino y les dijo “que hacéis aquí ladrones” y ellos
contestaron. Venimos por una escama tuya dijo Ulises mientras que salían los
demás de su escondite. Tenemos que salvar a una princesa dijo Jak. El dragón
dijo “¿y porque oléis a mal?” contestando: Porque caímos en una trampa con
un montó de cadáveres. El dragón se lo
creyó y les dio la escama, no sin antes ponerlos a prueba con un acertijo que
Meg supo descifrar. El dragón les
entrego la escama y se metió en su cueva.
Salieron todos
de allí y fueron hasta las ruinas de Cimbar. Tras volver al lugar donde se
ocultaba, Jak fue capaz de abrir la puerta de entrada y aparecieron ante el
gran Mago Oscuro de Nuevo. Él les dijo “Bien lo habéis conseguido. Tenemos la
máscara del dragón rojo, la escama del dragón plateado y el amuleto del
guerrero que he conseguido yo. Ahora nuestro siguiente paso es....” Fin
La Escama del
Dragón II (Viernes día 15 Abril)
Llegaron a la
entrada de la cueva Polmar el pícaro humano, Utua la Shardmind Bruja, Ulises un
humano clérigo que buscaba venganza por la muerte de su padre, Elath la
elandrin maga y Greedo el explorador elfo. Todos entraron dentro y encontraron
una bifurcaciones. Cogieron la izquierda y siguieron más adelante, luego
cogieron a la derecha y allí fue donde Utua se dio cuenta e una ranura en el
suelo. Aviso a Polmar que le costó mucho encontrarla. Todos mientras Ulises
encendía un cetro solar para poder ver la zona, y Greedo se subía por las
paredes para ir saltando. Elath no hizo caso de las advertencias de todos y
siguió hacia delante cayendo en una trampa de un foso. Allí pudo ver a muchos
de los cadáveres amontonados en un lado, pero Utua le lanzó una cuerda para que
pudiera subir y pudo salir fuera. Siguieron por los caminos volviendo al punto
de partida. Allí una voz sonó cerca de sus oídos que decía “todos los caminos
de la izquierda son los correctos”. Esa voz parecía la de Helenary. Siguieron
nuevamente eligiendo los caminos de la izquierda y esta vez vieron en el suelo,
varias señales con flechas hacia los distintos caminos. Sin saber por donde
seguir y esquivando una zona de una trampa, Elarth pareció ver algo a lo lejos
dorado. Esa forma dorada pareció que se metía bajo tierra, pero en verdad era
que existía un agujero de varios metros de altura. Greedo lo vio muy fácil. Si
atamos las cuerdas podré mirar y ver que hay abajo. Eso hicieron. Bajaron y
encontraron otras nuevas bifurcaciones de mas caminos. Tras seguir por varios
caminos se dieron cuenta que se escuchaba como si alguien estuviera chillando
de dolor. Polmar se adelantó hasta allí para ver lo que era, pero Elath quiso
pasar delante con la luz. Al otro lado estaba un dragón dorado comiéndose a un humano que aún seguía
vivo, pero se percató de que tenía visita. El draón intentó hablar pero Greedo
intentó lanzarle dos flechas que Elath paró con su rayo de escarcha.
Utua junto
con Ulises se escondieron para no ser vistos, mientras que el dragón pequeño
despertaba con gritos al dragón venerable plateado. Este preguntó: “que hacéis
aquí ladrones” y ellos contestaron. Venimos por una escama tuya dijo Elath
mientras que salían los demás de su escondite. Mientras esta llamaba su
atención, engaño con el sonido fantasma para que el dragón se diera la vuelta y
así poder Polmar intentar quitarle una escama. Después de un primer intento fallido
lo consiguió, pero los planes de Elath se fueron complicando, por lo que ella
huyó hacia un lado y los demás en sentido contrario. Intentó escapar subiendo
por la cuerda que el dragón cortó con sus garras quedando intimidada por él.
Pero a pesar de ello, Elath fue capaz de convencer al dragón para que no la
matase y le dieran la escama. Para salir de allí le ayudo el dragón dorado
encontrando a los demás para salir de allí.
Salieron todos
de allí y fueron hasta las ruinas de Cimbar. Tras volver al lugar donde se
ocultaba, Greedo fue capaz de abrir la puerta de entrada y aparecieron ante el
gran Mago Oscuro de Nuevo. Él les dijo “Bien lo habéis conseguido. Tenemos la
máscara del dragón rojo, la escama del dragón plateado y el amuleto del
guerrero que he conseguido yo. Ahora nuestro siguiente paso es....” Fin
La Escama del
Dragón II (Sábado día 16 Abril)
Llegaron a la
entrada de la cueva Grumilda la semiorca guerrera, Gork el enano Guerrero,
Kirac el humano mago, Raxes el draconido paladín, Garlick, el genasi bárbaro,
Trogathar un enano guerrero, Lars el explorador elfo. Todos entraron dentro y
encontraron una bifurcaciones. Cogieron la izquierda pero escucharon “todos los
caminos de la izquierda son los correctos”. Esa voz parecía la de Helenary,
pero Lars y Garlic no querían seguir las instrucciones. Raxes cogió uno de los
cetros de su equipo y empezaron a caminar. Tras varias bifurcaciones, llegaron
a un camino donde parecía tener un final y un pequeño lago. Después de
inspeccionar el agua dieron la vuelta y siguieron por otro de los caminos.
Garlick marcó los caminos mediante círculos, asteriscos y x. Después de seguir
a través de las siguientes bifurcaciones, encontraron unos círculos en ambas
zonas de las paredes que parecían ser una trampa de flechas. Grumilda lanzó una
piedra en ella y la trampa se activo. Tras varios intentos de Trogathar para
mover una piedra más pesada hacia la zona de la trampa y un intento fallido de
Grumilda corriendo hasta la otra punta pero sin éxito. Tras recibir tres
flechazos decidieron dejar la trampa detrás y seguir por otro camino. Allí
Raxes, encontró unos desprendimientos en los que buscó algún cadáver, pero solo
encontró un hueco con manchas de sangre. Seguieron por una seríe de
bifurcaciones marcadas por flechas en el suelo, simbolos extraños y una figura
con gafas, cuernos, medio gato que no entendían que significaba en el suelo. Ya
fue cuando Todos explotaron y Garlick avanzó sin seguir ninguna de las flechas
del suelo. Raxes fue delante y de repente
una de las trampas cedió. Calló en un foso de cadáveres, pero con la
ayuda de Gorok, Grumilda, Lars y Trogathar consiguieron sacarlo de allí con las
cuerdas y pasar al otro lado. Todos menos Kirac que cayó después de intentar
unas acrobacias extrañas.
Tras pasar el
foso y seguir hacia delante, en una de las bifurcaciones les apareció ver por
uno de los caminos, algo dorado como si descendiera hacia el suelo. Raxes fue a
mirar con su luz. Se encontró un hueco gigantesco que daba a un nivel inferior.
Unieron las cuerdas y bajo amenazando al dragón para que saliera. El gran
dragón plateado salió y pese pedirle la escama, este se negó. Subió por la
misma cuerda que había bajado pero el dragón les siguió. Este preguntó: “que
hacéis aquí ladrones” y ellos contestaron. “Existe un mago oscuro que vive en
Astrazalian y quiere destruir el mundo”. El Dragón que tenía ya una escama en
su mano pensando que era para una causa justa y no malvada, salió de la cueva
gritando “Astrazalian, Mago oscuro”, buscando ese lugar para encontrarlo y
destruirlo. Trogathar cogió la escama a
toda prisa, pero para Garlick y Grumilda la misión no había terminado. El
dragón también comentó algo de un “Tesoro” que ellos no iban a dejar allí, por
lo que bajaron de nuevo. Mientras los demás hacían el camino de vuelta hacia
las ruinas de cimbar. Garlick y Grumilda llegaron abajo, y escucharon los gritos
de una persona de dolor, más allá vieron su objetivo “el dragón dorado
pequeño”. Atacaron al dragón acabando con su vida y robándole varias escamas de
oro.
Salieron todos
de allí y fueron hasta las ruinas de Cimbar. Tras volver al lugar donde se
ocultaba, Lars fue capaz de abrir la puerta de entrada y aparecieron ante el
gran Mago Oscuro de Nuevo. Él les dijo “Bien lo habéis conseguido. Tenemos la
máscara del dragón rojo, la escama del dragón plateado y el amuleto del
guerrero que he conseguido yo. Ahora nuestro siguiente paso es....” Fin
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